6.05.2006


Esta vez no es cuestión de melancolía,
sólo déjenme llorar, que no hay dolor más intenso, el tiempo recobrará
la vitalidad... el tiempo, la vida... que se afilo perversa hundiéndose en su cuello.
Yo no postraré la agonía en mis átomos, no se preocupen niños.
Gracias es una palabra tan diminuta a veces, inmensa en mi boca para ustedes, que acariciaron mi continente lleno de lágrimas.
Un beso en los ojos hermosos ángeles... cómo algún día él lo hizo en los míos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha salido un barro en el cuello; supongo que de tanta tristeza y pus, mi cuerpo ha tenido que expanderse, aunque sea en los milímetros cúbicos de un simple barro.
No sé si quisiera que el tiempo volviera, si desear que jamás hubiera empezado junio. No sé tampoco si quisiera que el tiempo continuara. Simplemente no sé nada.
Dijeron que en el 6/6/06 se iba a terminar el mundo; pero las ruinas siguen en pie. Los edificios con sus sombras siguen ahí; también los pájaros en sus árboles, y los niños en sus escuelas. Todo, todos, todas siguen ahí. Incluso mi tristeza siguem aquí.
Ni todos los fármacos, ni todas las terapias, ni todas las muertes, ni todas las vidas me podrán quitar esto que para bien o mal es mío... esta tristeza que me hace el favor de nunca dejarme solo.

Anónimo dijo...

no se supone que los angeles no debieran de dar las gracias..?...yo. te doy las gracias por estar cerca de mi mundo. personitas tan especiales como ud hay que cuidarlas...hacen mas entretenida la estadia aqui...besos señorita....

monica dijo...

es muy melancolico, tiene una chispa de nostalgia en cada palabra, como de algo perdido o olvidados, como una esperanza a la te sujetas y poco a poco la vas soltando...


es muy lindo
y la imagen contrastra perfecto.
muchos saludos
nos estamos leyenfo.

monica Quiros